Cuando yo tenía entre once y doce años, en la tele ponían constantemente un anuncio que marcó mi infancia, y la del resto de mi generación.
Resulta que yo vivía en Argentina. Y el equivalente a la Teletienda en Argentina es Sprayette, que viene a ser lo mismo que la Teletienda pero con ese acento tan especial de los doblajistas mexicanos o venezolanos. El mismo que en las películas clásicas de Disney.
El anuncio en cuestión promocionaba un producto que prometía levantar tu vida sexual, un producto mágico (a juzgar por las imágenes) que en pocos segundos haría que tu sangre fluyera por... ejem... pues, por donde tiene que fluir en tiempos de guerra.
Su nombre, Rejuvensex. Gracias a Youtube, puedo embeber esta maravilla de la publicidad:
Imagino que habéis captado lo que quiero decir con "marcar mi generación". Pero, sobre todo, la última pareja que nos brinda su maravilloso testimonio. La mujer gordita y el gringo feliz están en la cabeza de millones de argentinitos y argentinitas. Más concretamente, su inimitable forma de contar su intimidad:
"Le decía: ok, suficiente, suficiente . Yo miraba y le decía: no, de nuevo no."
Y la frase estrella: ¡NO DE NUEVO, DECÍA!
Concretamente esa frase, y la forma tan feliz en la que el hombrecillo la expresa, forma parte de la cultura en la que me crié. Haced la prueba: si tenéis a un amigo argentino, exclamad: ¡no de nuevo, decía! Y a ver cómo reacciona. Probablemente se parta el Ohio, o bien lagrimee de la nostalgia.
Por supuesto, la escena ha sido parodiada en masa, y Youtube, nuevamente, es testigo:
http://youtube.com/watch?v=HzFE5NmQWy4http://youtube.com/watch?v=BMaWiR0bA1Y
http://youtube.com/watch?v=dYmbyfVBgn4
http://youtube.com/watch?v=7w33ELC0eEo
http://youtube.com/watch?v=umEIaQKU0X4
http://youtube.com/watch?v=pF-gHhHh6IA
Me ha gustado compartir con vosotros este anuncio que forma parte de mi infancia y de la de mis amigos más antiguos.
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